Mis carencias como encuadernador son muchas y graves, poco a poco, intento equilibrar la balanza con tesón y paciencia; a causa de ello, cada paso es una satisfacción. Las que considero mejores encuadernaciones ya se han vendido, que para eso tengo una librería; las obras que siguen en catálogo no desmerecen mi trabajo. Es inevitable especializarte en algunas técnicas ya que hay tentativas que no te acaban de convencer. Además de voluntad, aportas buenas herramientas y mejores materiales:
-. Los papeles jaspeados del maestro ebrú
Alberto Valese de Venecia, ya hablé de ellos en la primera entrada, colgaré alguna imagen.
-. Las guardas blancas: Verjurado Torreón, Ingres Guarro de 108 gramos, algún Fabriano de 120 gramos o por ahí. Encontré un paquetón de verjurado de
Vilaseca 1ª. de hace ya unos años, muchos, en perfectas condiciones, muestra de su calidad y que me aseguran el suministro por una temporada.
-. Para las guardas de color, utilizo papel
Canson de todos los colores, muy digno.
-. Las herramientas, de
Antonio Vela,
of course. (Santoña 41, Usera, Madrid). Muy majos. Me dice Antonio (abril 2011), que ya están en internet:
Antonio Vela
-. El cartón es una lotería, viviendo donde se encuentra la mayor papelera de Europa, sin embargo se convierte en una pesquisa interminable encontrar de calidad para encuadernar.
-. Las telas de lino, cabezadas, agujas, hilo encerado, plegaderas, oro y demás en
Divigar, Luis Vélez de Guevara, 7, Madrid.
-. Para restauración: papel japón, espátula caliente, metilcelulosa, papeles especiales, y cosas con que sacar matrícula de honor, (alguna vez también pico alguna cabezada o tela),
Productos de conservación.
Por supuesto siempre que voy a Madrid, entró por curiosidad en Amillo y me llevo cordel de 6 cabos, por si dejan de hacerlo, manias de viejo.
Lamento no haber rondado Barna, cuestión pendiente. Por internet aprendes mucho, recuerdo a algún profesional que se le ponían los ojos en blanco hablando de
Talas, mis consultas por su web no desdicen aquellas impresiones, el problema son los inconvenientes que ponen al porte, ...están locos estos romanos.
En alguna ocasión, pocas, pongo un papel impreso:
Tassotti, curioso.
El papel, cartón, piel, pergamino, tela, japón, tarlatana y demás lo coloco en un planero horizontal metálico inmenso, el mayor desembolso que he hecho, pero cumple su papel, no digo la marca ya que se lavaron las manos cuando se me estropeo una balda. Por tamaño sirve de refugio nuclear para una familia de cuatro miembros y mascota.
Aunque pueda parecer que dispongo de una nave industrial, no, no es cierto, el burro, prensa de cajos, el telar, el ingenio, todo colgado de la pared con ganchos de bici, muy prácticos; el grueso del material: química, colas, pesas y demás a un armario metálico persianero de oficina con muchas baldas graduables, lo mejor para que no se desmande el rebaño.
Si tengo ocasíón, hago mis buenas medias telas con puntas, vistas o no; me llamó mucho la atención las encuadernaciones alemanas en tapa suelta, todas en papel jaspeado y las hago siempre que puedo.
Grosso modo es con lo que trabajo y lo que me viene a la memoria mientras escribo, si sirve a alguien que me lea, ¡estupendo!, acepto recomendaciones.